miércoles, 31 de diciembre de 2014

Lecciones de UCM (Enero) - 2015

Explicaciones: El curso consiste en repetir una frase distinta cada día, en la frecuencia indicada. Al principio, las frases se dicen a la mañana (1 minuto de meditación sobre la frase) y a la noche, antes de dormir (otro minuto).

LECCIÓN 1 - 1 de enero

Nada de lo que veo en esta habitación [en esta calle, desde esta ventana, en este lugar]
significa nada.

1. Mira ahora lentamente. a tu alrededor, y aplica esta idea de manera muy concreta a todo lo que veas:

2 Esa mesa no significa nada.
3Esa silla no significa nada.
4Esta mano no significa nada.
5Este pie no significa nada.
6Esta pluma no significa nada.

2. Luego mira más allá de lo que se encuentra inmediatamente alrededor tuyo, y aplica la idea dentro de un campo más amplio:

2Esa puerta no significa nada.
3Ese cuerpo no significa nada.
4Esa lámpara no significa nada.
5Ese letrero no significa nada.
6Esa sombra no significa nada.

3. Observa que estas expresiones no siguen ningún orden deter­minado, ni hacen distinción entre la clase de cosas a las que se aplican. 2Ése es el propósito del ejercicio. 3La afirmación debe apli­carse sencillamente a cualquier cosa que veas. 4Al practicar con la idea del día, hazlo con total imparcialidad. 5No trates de aplicarla a todo lo que se encuentre dentro de tu campo visual, pues estos ejercicios no deben convertirse en un ritual. 6Asegúrate solamente de no excluir nada en particular.7Desde el punto de vista de la aplicación de la idea, una cosa es igual que cualquier otra.
4. Las tres primeras lecciones no deben hacerse más de dos veces al día, preferiblemente una vez por la mañana y otra por la noche. 2No deben pasar de un minuto más o menos, a no ser que eso cause una sensación de premura. 3Una cómoda sensación de reposo es esencial.

LECCIÓN 2 - 2 de enero

Le he dado a todo lo que veo en esta habitación [en esta calle, desde esta ventana, en este lugar] todo el significado que tiene para mí.

1. Los ejercicios que se deben llevar a cabo con esta idea son igua­les a los de la primera lección. 2Comienza con las cosas que estén cerca de ti, y aplica la idea a cualquier cosa en la que tu mirada se pose. 3Extiende luego tu campo visual. 4Gira la cabeza de modo que puedas incluir lo que se encuentre a ambos lados de ti. 5Si es posible, da la vuelta y aplica la idea a lo que se encuentre detrás de ti. 6Sé tan imparcial como puedas al seleccionar los objetos a los que vas a aplicar la idea; no te concentres en nada en particular, ni trates de incluir todo lo que veas en una zona determinada, ya que eso causaría tensión.
2. Echa simplemente una rápida mirada a tu alrededor, tratando de evitar la selección de objetos en función de su tamaño, brillan­tez, color o material, o de la relativa importancia que tengan para ti. 2El simple hecho de ver un objeto lo convierte en tu selección. 3Trata de aplicar la idea con la misma facilidad a un cuerpo que a un botón, a una mosca que a un piso, a un brazo que a una man­zana. 4El único criterio a seguir para aplicar la idea a algo es simplemente que tus ojos se hayan posado sobre ello. 5No trates de incluir nada en particular, pero asegúrate de no excluir nada deliberadamente.

LECCIÓN 3 - 3 de enero

No entiendo nada de lo que veo en esta habitación [en esta calle, desde esta ventana,
en este lugar].

1. Aplica esta idea de la misma manera que las anteriores, sin hacer distinciones de ninguna clase. 2Cualquier cosa que veas se convierte en el objeto adecuado para la aplicación de la idea. 3Ase­gúrate de no cuestionar si es adecuado o no aplicarle la idea a algo. 4En estos ejercicios no se trata de juzgar. 5Cualquier cosa es adecuada si la: ves. 6Tal vez algunas de las cosas que veas tengan una carga emocional para ti. 7Trata de dejar a un lado esos senti­mientos, y simplemente aplícales la idea tal como se la aplicarías a cualquier otra cosa.
2. El objetivo de los ejercicios es ayudarte a despejar la mente de todas las asociaciones del pasado, para que puedas ver las cosas exactamente tal como se presentan ante ti ahora y también para que te des cuenta de lo poco que realmente entiendes acerca de ellas. 2Es esencial, por lo tanto, que tu mente se mantenga perfec­tamente receptiva y libre de juicios al seleccionar las cosas a las cuales vas a aplicar la idea del día. 3A tal efecto, una cosa es como cualquier otra: igualmente adecuada y, por lo tanto, igualmente útil.

LECCIÓN 4 - 4 de enero

Estos pensamientos no significan nada. Son como las cosas que veo en esta
habitación [en esta calle, desde esta ventana, en este lugar].

1. Estos ejercicios, a diferencia de los anteriores, no comienzan con la idea de hoy. 2Da comienzo a estas sesiones de práctica observando los pensamientos que crucen tu mente durante un minuto más o menos. 3Luego aplícales la idea. 4Si ya eres cons­ciente de pensamientos que no te hacen feliz, úsalos como sujetos para la idea. 5No selecciones, no obstante, sólo los pensamientos que a tu parecer son "malos”. 6Si te acostumbras a observar tus pensamientos, descubrirás que éstos representan una mezcla tal, que, en cierto sentido, a ninguno de ellos puede calificársele de "bueno" o de "malo". 7Por eso es por lo que no significan nada.
2. Al seleccionar los sujetos para la aplicación de la idea de hoy, se requiere la acostumbrada especificidad. 2No temas usar pensa­mientos "buenos" ni "malos". 3Ninguno de ellos constituye tus pensamientos reales, los cuales se encuentran ocultos tras ellos. 4Los "buenos" no son sino sombras de lo que está más allá, y las sombras dificultan la visión. 5Los "malos" son obstáculos para la visión, y, por lo tanto, te impiden ver. 6No te interesan ni unos ni otros.
3. Éste es un ejercicio importante, y se repetirá de vez en cuando de forma ligeramente distinta. 2Nuestra meta es entrenarte en los primeros pasos hacia el objetivo de poder separar lo que no tiene significado de lo que sí lo tiene. 3Representa el primer esfuerzo en el objetivo a largo plazo de aprender a ver que lo que carece de significado se encuentra fuera de ti, y lo significativo dentro. 4Es también el comienzo del entrenamiento que le permitirá a tu mente distinguir entre lo que es lo mismo y lo que es diferente.
4. Al usar tus pensamientos como sujetos para la aplicación de la idea de hoy, identifica cada uno de ellos por la figura o aconteci­miento central que contenga. aPor ejemplo:

2Este pensamiento acerca de _______     no significa nada. 3Es como las cosas que veo en esta habitación, (en esta calle, etc.].

5. Puedes aplicar la idea asimismo a cualquier pensamiento en particular que reconozcas que es perjudicial. 2Esta práctica es útil, pero no sustituye al procedimiento de selección más al azar que debe seguirse al llevar a cabo los ejercicios.3En cualquier caso, no examines tu mente por más de un minuto. 4Aún no tie­nes suficiente experiencia como para poder evitar la tendencia a preocuparte innecesariamente.
6. Además, puesto que estos ejercicios son los primeros de su índole, tal vez te resulte especialmente difícil suspender todo jui­cio en conexión, con tus pensamientos. 2No repitas los ejercicios más de tres o cuatro veces al día. 3Volveremos a ellos más ade­lante.

LECCIÓN 5 - 5 de enero

Nunca estoy disgustado por la razón que creo.

1.  Esta idea, al igual que la anterior, puede aplicarse a cualquier persona, situación o acontecimiento que creas que te está cau­sando dolor. 2Aplícala específicamente a lo que, según tú, es la causa de tu disgusto, y usa, para describir el sentimiento, el tér­mino que te parezca más preciso. 3El disgusto puede manifes­tarse en forma de miedo, preocupación, depresión, ansiedad, ira, odio, celos o un sinnúmero de otras formas, y cada una de ellas se percibirá como algo diferente. 4Mas no es cierto que sean dife­rentes. 5Sin embargo, hasta que aprendas que la forma no importa, cada una de ellas constituirá materia apropiada para los ejercicios de hoy. 6Aplicar la misma idea a cada una de ellas por separado es el primer paso que te lleva a reconocer finalmente que todas ellas son lo mismo.
2. Al aplicar la idea de hoy a lo que percibas como la causa espe­cífica de cualquier forma de disgusto, usa el nombre del disgusto de que se trate, así como la causa que le atribuyes. 2Por ejemplo:

3No estoy enfadado con ______ por la razón que creo.
4No tengo miedo de _____  por la razón que creo.

3. Pero una vez más, esto no debe sustituir a las sesiones de práctica en las que primero examinas tu mente en busca de lo que crees son las "causas" del disgusto, y las formas de disgusto que, según tú, resultan de ellas.
4. En estos ejercicios, incluso más que en los anteriores, es posible que te resulte más difícil ser imparcial y evitar concederles más importancia a unos temas que a otros. 2Tal vez te resulte útil encabezar los ejercicios con la siguiente afirmación:

3No hay disgustos pequeños. 4Todos perturban mi paz mental por igual.

5. Luego busca en tu mente cualquier cosa que te esté afligiendo, independientemente de si te está afligiendo poco o mucho.
6. Es posible también que te sientas menos dispuesto a aplicar la idea de hoy a algunas de las causas de los disgustos que percibes que a otras. 2De ocurrir eso, piensa en primer lugar en lo siguiente:

                        3No puedo conservar esta forma de disgusto y al mismo tiempo desprenderme de las demás.
            4Para los efectos de estos ejerci­cios, pues, las consideraré a todas como si fuesen iguales.

7. Escudriña luego tu mente durante un minuto más o menos y trata de identificar las diferentes formas de disgustos que te estén perturbando, haciendo caso omiso de la relativa importancia que tal vez les atribuyas. 2Aplica la idea de hoy a cada una de ellas, usando el nombre de la causa del disgusto tal como la percibas, y el del sentimiento tal como lo experimentes. 3Los siguientes son ejemplos adicionales:
4No estoy preocupado acerca de _____ por la razón que creo.
5No estoy deprimido acerca de _____ por la razón que creo.

6Tres o cuatro veces al día será suficiente.

LECCIÓN 6 - 6 de enero

Estoy disgustado porque veo algo que no está ahí.

1. Los ejercicios que se han de llevar acabo con esta idea son muy similares a los anteriores. 2Es necesario, una vez más, que para cualquier aplicación de la idea de hoy nombres muy concreta­mente la forma de disgusto de que se trate (ira, miedo, preocupa­ción, depresión, etc.), así como lo que percibes como su causa. 3Por ejemplo:

4Estoy enfadado con ______ porque veo algo que no está ahí.
5Estoy preocupado acerca de _____ porque veo algo que no está ahí.

2. Conviene aplicar la idea de hoy a cualquier cosa que parezca disgustarte, y puede usarse provechosamente durante el trans­curso del día con ese propósito. 2No obstante, las tres o cuatro sesiones de práctica que hoy se requieren deben ir precedidas, como en días pasados, por un minuto más o menos de búsqueda mental, seguido de una aplicación de la idea a cada pensamiento de disgusto descubierto en dicha búsqueda.
3. Una vez más, si te resistes a aplicar la idea a algunos de los pensamientos que te causan disgusto más que a otros, recuerda las dos advertencias mencionadas en la lección anterior:
2No hay disgustos pequeños. 3Todos perturban mi paz men­tal por igual.
4Y:
5No puedo conservar esta forma de disgusto y al mismo tiempo desprenderme de las demás. 6Para los efectos de estos ejercicios, pues, las consideraré a todas como si fuesen iguales.

LECCIÓN 7 - 7 de enero
Sólo veo el pasado.

1. Esta idea resulta muy difícil de creer al principio. 2Sin embargo, es la razón fundamental de todas las anteriores.
3Es la razón por la que nada de lo que ves significa nada.
4Es la razón por la que le has dado a todo lo que ves todo el significado que tiene para ti.
5Es la razón por la que no entiendes nada de lo que ves.
6Es la razón por la que tus pensamientos no significan nada y por lo que son como las cosas que ves.
7Es la razón por la que nunca estás disgustado por la razón que crees.
8Es la razón por la que estás disgustado porque ves algo que no está ahí.
2. Cambiar las viejas ideas que se tienen acerca del tiempo es muy difícil porque todo lo que crees está arraigado en el tiempo, y depende de que no aprendas estas nuevas ideas acerca de él. 2Sin embargo, ésa es precisamente la razón por la que necesitas nuevas ideas acerca del tiempo. 3Esta primera idea acerca del tiempo no es realmente tan extraña como pueda parecer en un principio.
3. Observa una taza, por ejemplo. 2¿Estás realmente viendo la taza, o simplemente revisando tus experiencias previas de haber levantado una taza, de haber tenido sed, de haber bebido de ella, de haber sentido su borde rozar tus labios, de haber desayunado, y así sucesivamente? 3¿Y no están acaso tus reacciones estéticas con respecto a la taza basadas asimismo en experiencias pasadas? 4¿De qué otra manera sino sabrías que esa clase de taza se rompe si la dejas caer? 5¿Qué sabes acerca de esa taza sino lo que apren­diste en el pasado? 6No tendrías idea de lo que es si no fuera por ese aprendizaje previo. 7¿Estás, entonces, viéndola realmente?
4. Mira a tu alrededor. 2Esto se aplica igualmente a cualquier cosa que veas. 3Reconoce esto al aplicar la idea de hoy indistintamente a cualquier cosa que te llame la atención. 4Por ejemplo:
5Sólo ve el pasado en este lápiz. 6Sólo veo el pasado en este zapato. 7Sólo veo el pasado en esta mano.
8Sólo veo el pasado en ese cuerpo. 9Sólo veo el pasado en esa cara.

5. No te detengas en ninguna cosa en particular, pero recuerda no omitir nada específicamente. 2Mira brevemente cada objeto, y luego pasa al siguiente. 3Tres o cuatro sesiones de práctica, cada una de un minuto más o menos de duración, bastarán.

LECCIÓN 8 - 8 de enero

Mi mente está absorbida con pensamientos del pasado.

1. Esta idea es, obviamente, la razón de que veas únicamente el pasado. 2En realidad nadie ve nada. 3Lo único que ve son sus propios pensamientos proyectados afuera. 4El hecho de que la mente esté absorbida con el pasado es la causa del concepto erró­neo acerca del tiempo de que adolece tu visión. 2Tu mente no puede captar el presente, que es el único tiempo que hay. 6Por consiguiente, no puede entender el tiempo, y, de hecho, no puede entender nada.
2. El único pensamiento completamente verdadero que se puede tener acerca del pasado es que no está aquí. 2Pensar acerca del pasado, por lo tanto, es pensar en ilusiones. 3Muy pocos se han dado cuenta de lo que realmente supone visualizar el pasado o prever el futuro. 4De hecho, la mente está en blanco al hacer eso, ya que en realidad no está pensando en nada.
3. El propósito de los ejercicios de hoy es comenzar a entrenar a tu mente a reconocer cuando no está realmente pensando en abso­luto. 2Mientras tu mente siga absorbida con ideas sin contenido, la verdad permanecerá bloqueada. 3Reconocer que tu mente ha estado simplemente en blanco, en vez de seguir creyendo que está llena de ideas reales, es el primer paso en el proceso de allanar el camino a la visión.
4. Los ejercicios de hoy deben hacerse con los ojos cerrados. 2Ello es así porque en realidad no puedes ver nada, y es más fácil reco­nocer que por muy vívidamente que puedas visualizar un pensa­miento, no estás viendo nada. 3Con el mayor desapego que puedas, escudriña tu mente durante el habitual minuto más o menos, notando simplemente los pensamientos que allí encuen­tres. 4Nombra cada uno por la figura central que contenga, y luego pasa al siguiente. 5Da inicio a la sesión de práctica diciendo:

6Parece que estoy pensando en _____

5. Luego describe detalladamente cada uno de tus pensamientos. Por ejemplo:

3Parece que estoy pensando en [nombre de la persona], en [nombre del objeto], en [nombre de la emoción],

y así sucesivamente, concluyendo al final del período de bús­queda mental con:

4Pero mi mente está absorbida con pensamientos del pasado.

6. Esto puede hacerse cuatro o cinco veces en el transcurso del día, a menos que te resulte irritante. 2Si te resulta difícil, tres o cuatro veces es suficiente. 3Tal vez te ayude, no obstante, incluir la irritación, o cualquier emoción que la idea de hoy pueda susci­tar, en la búsqueda mental en sí.

LECCIÓN 9 - 9 de enero

No veo nada tal como es ahora.

1. Esta idea es, obviamente, la consecuencia lógica de las dos ante­riores. 2Pero si bien es posible que la puedas aceptar intelectual­mente, es muy probable que todavía no signifique nada para ti. 3De todas formas, el entendimiento no es necesario a estas alturas. 4De hecho, reconocer que no entiendes es un requisito previo para erradicar tus falsas ideas. 5Estos ejercicios tienen que ver con la práctica, no con el entendimiento. 6No necesitas practicar lo que ya entiendes. 7Sería bastante redundante, por cierto, tener como meta el entendimiento y al mismo tiempo asumir que ya lo has alcanzado.
2. A la mente no entrenada le resulta difícil creer que lo que apa­rentemente contempla realmente no está ahí. 2Esta idea puede producir gran inquietud, y toparse con gran resistencia, la cual puede manifestarse de muchas maneras. 3No obstante, eso no excluye el que la apliques. 4Esto es lo único que se requiere para estos ejercicios o para cualesquiera otros. 5Cada pequeño paso despejará la oscuridad un poco más, y el entendimiento final­mente llegará para iluminar cada rincón de la mente que haya sido despejada de los escombros que la enturbiaban.
3. Estos ejercicios, para los que tres o cuatro sesiones de práctica son suficientes, consisten en que mires a tu alrededor y apliques la idea de hoy a cualquier cosa que veas, sin olvidarte de la necesi­dad de aplicarla imparcialmente, y la regla esencial de no excluir nada. 2Por ejemplo:

3No veo esta máquina de escribir tal como es ahora.
4No veo este teléfono tal como es ahora.
5No veo este brazo tal como es ahora.

4. Empieza con aquellas cosas que estén más cerca de ti, y luego extiende tu campo visual:

2No veo ese perchero tal como es ahora.
 3No veo esa puerta tal como es ahora.
4No veo esa cara tal como es ahora.

5. Hay que subrayar nuevamente, que, si bien no debes intentar incluirlo todo, tampoco debes excluir nada en particular. 2Asegúrate de ser honesto contigo mismo al hacer esta distinción. 3Es posible que te sientas tentado de enmascararla.

LECCIÓN 10 - 10 de enero

Mis pensamientos no significan nada.

1. Esta idea es aplicable a todos los pensamientos de los que eres -o te vuelves- consciente durante las sesiones de práctica. 2La razón de que se pueda aplicar a todos ellos es que no son tus pensamientos reales. 3Hemos hecho esta distinción con anteriori­dad, y la volveremos a hacer de nuevo. 4Todavía no tienes base de comparación. 5Cuando la tengas, no te cabrá la menor duda de que lo que una vez creíste eran tus pensamientos en realidad no significaban nada.
2. Esta es la segunda vez que usamos este tipo de idea. 2Sólo la forma es ligeramente distinta. 3Esta vez la idea se introduce con "Mis pensamientos" en lugar de "Estos pensamientos". y no se establece expresamente ningún vínculo con las cosas que se encuentran a tu alrededor. 4Lo que enfatizamos ahora es la falta de realidad de lo que piensas que piensas.
3. Este aspecto del proceso de corrección comenzó con la idea de que los pensamientos de que eres consciente no significan nada y de que se encuentran afuera en vez de adentro; luego se subrayó el hecho de que son del pasado y no del presente.2En lo que ahora estamos haciendo hincapié es en el hecho de que la presen­cia de esos "pensamientos" significa que no estás pensando en absoluto. 3Esto no es más que otra forma de repetir nuestra afir­mación previa de que tu mente está realmente en blanco. 4Reco­nocer esto es lo mismo que reconocer la nada cuando piensas que la ves. 5Como tal, es el requisito previo para la visión.
4. Cierra los ojos durante estos ejercicios, e inícialos repitiendo para tus adentros la idea de hoy muy lentamente. 2Luego añade:

3Esta idea me ayudará a liberarme de todo lo que ahora creo.

4Estos ejercicios consisten, al igual que los anteriores, en escudri­ñar tu mente en busca de todos los pensamientos que puedas encontrar, sin seleccionarlos ni juzgarlos. 5Trata de evitar cual­quier tipo de clasificación. 6De hecho, si te resulta útil, puedes imaginarte que estás viendo pasar una procesión compuesta de un extraño repertorio de pensamientos que tienen muy poco o ningún significado personal para ti. 7A medida que cada uno de ellos cruce tu mente, di:

8Mi pensamiento acerca de _____ no significa nada.
9Mi pensamiento acerca de _____ no significa nada.

5. La idea de hoy puede servir, obviamente, para cualquier pensa­miento que te perturbe en cualquier momento. 2Se recomiendan además cinco sesiones de práctica, en las cuales debes escudriñar tu mente durante no más de un minuto aproximadamente. 3No es recomendable alargar ese período de tiempo, y en caso de que se experimente incomodidad el mismo debería reducirse a medio minuto o menos. 4Acuérdate, no obstante, de repetir la idea muy despacio antes de aplicarla concretamente, así como de añadir:

5Esta idea me ayudará a liberarme de todo lo que ahora creo.

LECCIÓN 11 - 11 de enero

Mis pensamientos sin significado me están mostrando un mundo sin significado.

1. De todas las ideas que hemos presentado hasta ahora, ésta es la primera que está relacionada con una de las fases principales del proceso de corrección: la inversión de la manera de pensar del mundo. 2Parece como si fuese el mundo el que determina lo que percibes. 3La idea de hoy introduce el concepto de que son tus pensamientos los que determinan el mundo que ves. 4Alé­grate en verdad de practicar la idea en su forma original, pues en esta idea reside la certeza de tu liberación. 5La llave del perdón se encuentra en ella.
2. Las sesiones de práctica con la idea de hoy deben llevarse a cabo de forma ligeramente distinta de las anteriores. 2Comienza con los ojos cerrados y repite la idea lentamente para tus adentros. 3Abre luego los ojos y mira a tu alrededor, así como a lo que está cerca, a lo que está lejos y a lo que está encima o debajo de ti. aMira por todas partes. 4Durante el minuto más o menos a emplear usando la idea, simplemente repítela en silencio y asegúrate de hacerlo sin prisa y sin ninguna sensación de urgencia o esfuerzo.
3. Para derivar el máximo beneficio de estos ejercicios, los ojos deben pasar de una cosa a otra con cierta rapidez, ya que no deben detenerse en nada en particular. 2Las palabras, en cambio, deben usarse pausada, e incluso, relajadamente. 3La introducción a esta idea, en particular, debe practicarse de la manera más casual que puedas. 4Contiene los cimientos de la paz, de la relaja­ción y de la ausencia de preocupación que estamos tratando de lograr. 5Al final de los ejercicios, cierra los ojos y repite lentamente la idea para tus adentros una vez más.
4. Tres sesiones de práctica probablemente serán suficientes hoy. 2No obstante, si no sientes ningún desasosiego o si éste es muy ligero, y te sientes inclinado a ello, puedes hacer hasta cinco. 3Más de eso no es recomendable.
 
LECCIÓN 12 - (12 de enero)
Estoy disgustado porque veo un mundo que no tiene significado.

1. La importancia de esta idea radica en el hecho de que contiene la corrección de una importante distorsión perceptual. 2Piensas que lo que te disgusta es un mundo aterrador o un mundo triste; un mundo violento o un mundo demente. 3Todos esos atributos se los otorgas tú. 4El mundo de por sí no tiene significado.
2. Estos ejercicios deben hacerse con los ojos abiertos. Mira a tu alrededor, está vez muy lentamente. 3Trata de seguir un ritmo tal, que el lento pasar de tu mirada de una cosa a otra sea a intervalos de tiempo bastante similares. 4No permitas que el lapso de tiempo empleado para pasar de una cosa a otra sea ostensiblemente más corto o más largo; trata, en cambio, de mantener un compás medido y parejo a lo largo de todo el ejercicio. 5Lo que veas no importa. 6Te enseñas esto a medida que le prestas la misma aten­ción y le dedicas el mismo tiempo a cualquier cosa sobre la que tu mirada se pose. 7Éste es uno de los pasos iniciales en el proceso de aprender a conferirles a todas las cosas el mismo valor.
3. A medida que mires a tu alrededor, di para tus adentros:

2Creo ver un mundo temible, un mundo hostil, un    mundo peligroso, un mundo triste, un mundo per­verso, un mundo enloquecido,

y así sucesivamente, usando cualquier término descriptivo que se te ocurra. 3Si se te ocurren términos que parecen ser positivos en vez de negativos, inclúyelos también. 4Podrías pensar, por ejemplo, en "un mundo bueno" o en "un mundo agradable". 5Si se te ocurren términos de esa índole úsalos junto con los demás. 6Es posible que aún no entiendas por qué esos adjetivos "buenos" forman parte de estos ejercicios, pero recuerda que un "mundo bueno" implica uno "malo ; y uno "agradable" implica uno "desagradable" . 7Todos los términos que te vengan a la mente son ade­cuados para los ejercicios de hoy. 8Su aparente valor no importa.
4. Asegúrate, al aplicar la idea de hoy, de no alterar la duración de los intervalos de tiempo entre lo que piensas que es agradable y lo que piensas que es desagradable. 2Para los efectos de estos ejercicios, no hay diferencia alguna entre una cosa y otra. 3Al final de la sesión de práctica, añade:

4Pero estoy disgustado porque veo un mundo que no tiene significado.

5. Lo que carece de significado no es ni bueno ni malo. 2¿Por qué, entonces, habría de disgustarte un mundo que no tiene signifi­cado? 3Si pudieses aceptar al mundo como algo que carece de significado y dejar que en lugar de lo que tú crees la verdad se escribiese en él por ti, ello te llenaría de una felicidad indescripti­ble. 4Pero precisamente porque carece de significado te sientes impulsado a escribir en él lo que tú quisieras que fuese. 5Eso es lo que ves en él. 6Eso es lo que en verdad no tiene significado. 7Bajo tus palabras está escrita la Palabra de Dios. 8La verdad te disgusta ahora, pero cuando tus palabras hayan sido borradas, verás la Suya. 9Ese es, en última instancia, el propósito de estos ejercicios.
6. Tres o cuatro sesiones de práctica con la idea de hoy serán suficientes. 2Dichas sesiones no deben pasar de un minuto. 3Es posible que incluso un minuto te resulte demasiado largo. 4Sus­pende los ejercicios en el momento en que experimentes cual­quier tensión.

LECCIÓN 13 - (13 de enero)
Un mundo sin significado engendra temor.

1. La idea de hoy es realmente una variación de la anterior, excepto que es más específica en cuanto a la emoción suscitada. 2De hecho, un mundo sin significado es imposible.3Lo que no tiene significado no existe. 4Sin embargo, de eso no se deduce que tú no puedas pensar que percibes algo que no tiene significado. 5Por el contrario, eres especialmente propenso pensar que sí lo percibes.
2. El reconocimiento de esa falta de significado produce una aguda ansiedad en todos los que se perciben como separados. 2Representa una situación en la que Dios y el ego se "desafían" entre sí con respecto a qué significado ha de escribirse en el espa­cio vacío provisto por dicha falta. 3El ego se abalanza frenéticamente para establecer allí sus propias ideas, temeroso de que, de otro modo, el vacío pueda ser utilizado para demostrar su propia impotencia e irrealidad. 4solamente en esto está en lo cierto.
3. Es esencial, por lo tanto, que aprendas a reconocer lo que no tiene significado y a aceptarlo sin temor. 2Si tienes miedo, no podrás por menos que dotar al mundo con atributos que no posee, y abarrotarlo con imágenes que no existen. 3Para el ego, las ilusiones son dispositivos de seguridad, como deben serlo también para ti que te equiparas con él.
4. Los ejercicios de hoy, que deben hacerse unas tres o cuatro veces, sin que excedan un minuto cada vez, han de practicarse de manera ligeramente distinta de los anteriores.2Repite la idea de hoy para tus adentros con los ojos cerrados. 3Luego abre los ojos y mira lentamente a tu alrededor mientras dices:

4Estoy contemplando un mundo que no tiene significado.

5Repite esta afirmación para tus adentros mientras miras a tu alre­dedor. 6Luego cierra los ojos y concluye con:

7Un mundo que no tiene significado engendra temor por­que creo que estoy compitiendo con Dios.

5. Tal vez te resulte difícil evitar resistirte, en una forma u otra, a esta última afirmación. 2Sea cual fuere la forma en que se mani­fieste dicha resistencia, recuérdate a ti mismo que en realidad tie­nes miedo de esa clase de pensamiento debido a la "venganza" del "enemigo”. 3No se espera que a estas alturas creas esta afirma­ción, y probablemente la descartarás por considerarla absurda. 4Observa cuidadosamente, no obstante, cualquier señal de temor patente o encubierto que dicha afirmación pueda suscitar.
6. Ésta es la primera vez que intentamos exponer una relación explícita de causa y efecto de una clase que aún eres muy inex­perto en reconocer. 2No te enfrasques en esa última afirmación, y no trates ni siquiera de pensar en ella, excepto durante las sesio­nes de práctica. 3Eso es suficiente por ahora.

LECCIÓN 14 - (14 de enero)
Dios no creó un mundo sin significado.

1. La idea de hoy es obviamente la razón de que sea imposible que haya un mundo que no tenga significado. 2Lo que Dios no creó no existe. 3todo lo que existe, existe tal como Él lo creó. 4El mundo que ves no tiene nada que ver con la realidad. 5Es tu pro­pia obra, y no existe.
2. Los ejercicios de hoy deben practicarse con los ojos cerrados todo el tiempo. 2El período de búsqueda mental debe ser corto, a lo sumo un minuto. 3No lleves a cabo más de tres sesiones de práctica con la idea de hoy a menos que te sientas a gusto hacién­dolas. 4De ser así, es porque realmente entiendes su propósito.
3. La idea de hoy es un paso más en el proceso de aprender a abandonar los pensamientos que le has adscrito al mundo, y a ver en su lugar la Palabra de Dios. 2Los pasos iniciales de este intercambio, al que verdaderamente se le puede llamar salvación, pueden ser bastante difíciles e incluso dolorosos. 3Algunos de ellos te conducirán directamente al miedo. 4Mas no se te dejará ahí. 5Irás mucho más allá de él, 6pues es hacia la paz y seguridad perfectas adonde nos encaminamos.
4. Piensa, mientras mantienes los ojos cerrados, en todos los horrores del mundo que te vengan a la mente. 2Nombra cada uno de ellos a medida que se te ocurra, e inmediatamente niega su realidad. 3Dios no lo creó, y, por lo tanto, no es real. 4Di, por ejemplo:

5Dios no creó esa guerra, por lo tanto, no es real.
6Dios no creó ese accidente de aviación, por lo tanto, no es real.
7Dios no creó [especifica el desastre], por lo tanto, no es real.

5. Entre los temas adecuados para la aplicación de la idea de hoy se puede incluir, asimismo, todo aquello que temas te pueda ocu­rrir ti, o a cualquier persona por la que estés preocupado. 2Nom­bra en cada caso el "desastre" en cuestión muy concretamente. 3No uses términos abstractos. 4Por ejemplo, no digas: "Dios no creó las enfermedades”, sino "Dios no creó el cáncer'; o los ata­ques cardíacos, o lo que sea que te cause temor.
6. Eso que estás contemplando es tu repertorio personal de horro­res. 2Esas cosas son parte del mundo que ves. 3Algunas de ellas son ilusiones que compartes con los demás, y otras son parte de tu infierno personal. 4Eso no importa. 5Lo que Dios no creó sólo puede estar en tu propia mente, separada de la Suya. 6Por lo tanto, no tiene significado. 7En reconocimiento de este hecho, concluye las sesiones de práctica repitiendo la idea de hoy:

8Dios no creó un mundo sin significado.

7. Por supuesto, la idea de hoy puede aplicarse, aparte de las sesiones de práctica, a cualquier cosa que te perturbe a lo largo del día. 2Sé muy específico al aplicarla. 3Di:

4Dios no creó un mundo sin significado.
5No creó [especifica la situación que te esté perturbando], por lo tanto, no es real.

LECCIÓN 15 - (15 de enero)
Mis pensamientos son imágenes que yo mismo he fabricado.

1. No reconoces que los pensamientos que piensas que piensas no son nada debido a que aparecen como imágenes. 2Piensas que los piensas, y por eso piensas que los ves.3Así es como se forjó tu "manera de ver". 4Ésta es la función que le has atribuido a los ojos del cuerpo. 5Eso no es ver. 6Eso es fabricar imágenes, 7lo cual ocupa el lugar de la visión, y la reemplaza con ilusiones.
2. Esta idea introductoria al proceso de fabricar imágenes que tú llamas ver, seguramente no tendrá mucho significado para ti al principio. 2Comenzarás a entenderla cuando hayas visto peque­ños bordes de luz alrededor de los mismos objetos que ahora te resultan familiares. 3Ése es el comienzo de la verdadera visión. 4Puedes estar seguro de que ésta no tardará en llegar una vez que eso haya ocurrido.
3. A medida que avancemos, tal vez experimentes muchos "episo­dios de luz". 2Éstos pueden manifestarse de muchas maneras dis­tintas, algunas de ellas bastante inesperadas.3No tengas miedo de ellos. 4Son la señal de que por fin estás abriendo los ojos. 5No seguirán ocurriendo, pues simbolizan meramente la percepción verdadera y no guardan relación alguna con el conocimiento. 6Estos ejercicios no han de revelarte el conocimiento, 7pero allana­rán el camino que conduce a él.
4. Al practicar con la idea de hoy, repítela primero para tus aden­tros, y luego aplícala a cualquier cosa que veas a tu alrededor, usando el nombre del objeto en cuestión y dejando descansar tu mirada sobre él mientras dices:

2Esta(e) _____ es una imagen que yo mismo he fabricado.
3Ese(a) _____ es una imagen que yo mismo he fabricado.

4No es necesario incluir un gran número de objetos específicos al aplicar la idea de hoy. 5Pero sí es necesario que continúes mirando cada objeto mientras repites la idea para tus adentros. 6La idea debe repetirse muy lentamente en cada caso.
5. Si bien es obvio que no podrás aplicar la idea a un gran número de objetos durante el minuto más o menos de práctica que se reco­mienda, trata de seleccionarlos tan al azar como sea posible. 2Si te empiezas a sentir incómodo, menos de un minuto será suficiente. 3No lleves a cabo más de tres sesiones de práctica con la idea de hoy a no ser que te sientas completamente a gusto con ella, pero no hagas más de cuatro. 4Puedes, no obstante, aplicar la idea durante el transcurso del día según lo dicte la necesidad.

  LECCIÓN 16  - (16 de enero)
No tengo pensamientos neutros.

1. La idea de hoy es uno de los pasos iniciales en el proceso de desvanecer la creencia de que tus pensamientos no tienen ningún efecto. 2Todo lo que ves es el resultado de tus pensamientos. 3En esto no hay excepciones. 4Los pensamientos no son ni grandes ni pequeños, ni poderosos ni débiles. 5Son simplemente verdaderos o falsos. 6Aquellos que son verdaderos crean a su semejanza. 7Aquellos que son falsos fabrican a la suya.
2. No hay concepto más auto-contradictorio que el de "pensa­mientos fútiles" 2Difícilmente se puede calificar de fútil a lo que da origen a la percepción de todo un mundo. 3Cada pensamiento que tienes contribuye a la verdad o a la ilusión: o bien extiende la verdad o bien multiplica las ilusiones. 4Ciertamente puedes mul­tiplicar lo que no es nada, pero no por ello lo estarás exten­diendo.
3. Además de reconocer que los pensamientos no son nunca fúti­les, la salvación requiere que también reconozcas que cada pen­samiento que tienes acarrea paz o guerra, amor o miedo. 2Un resultado neutral es imposible porque es imposible que haya pensamientos neutros. 3Hay tal tentación de descartar los pensamientos atemorizantes por considerárseles irrelevantes, triviales e inmerecedores de que uno se ocupe de ellos, que es esencial que los reconozcas a todos como igualmente destructivos, aun­que también como igualmente irreales. 4Practicaremos con esta idea de muchas formas antes de que realmente la llegues a enten­der.
4. Al aplicar la idea de hoy, escudriña tu mente con los ojos cerra­dos durante un minuto más o menos, esforzándote al máximo por no pasar por alto ningún pensamiento "insignificante" que tienda a eludir tu búsqueda. 2Esto te resultará bastante difícil hasta que te acostumbres a ello. 3Descubrirás que todavía te resulta difícil no hacer distinciones artificiales. 4Cualquier pensamiento que se te ocurra, independientemente de las cualidades que le asignes, es un sujeto adecuado para aplicarle la idea de hoy.
5. Durante las sesiones de práctica, repite primero la idea para tus adentros, y luego, a medida que cada pensamiento cruce tu mente, manténlo en tu conciencia mientras te dices a ti mismo:

2Este pensamiento acerca de _____ no es un pensamiento neutro.
3Ese pensamiento acerca de _____ no es un pensamiento neutro.

4Como de costumbre, usa la idea de hoy cada vez que notes algún pensamiento en particular que te produzca desasosiego. 5Sugeri­mos a este fin la siguiente variación de la idea:

6Este pensamiento acerca de _____ no es un pensamiento neutro porque no tengo pensamientos neutros.

Se recomiendan cuatro o cinco sesiones de práctica en caso de que te resulten relativamente fáciles. 'De experimentar tensión, tres serán suficientes. 3La duración del ejercicio debe reducirse asimismo si experimentas cualquier sensación de incomodidad. .

LECCIÓN 17 - (17 de enero)
No veo cosas neutras.

1. Esta idea es otro paso en el proceso de identificar causa y efecto tal como realmente operan en el mundo. 2No ves cosas neutras porque no tienes pensamientos neutros. 3El pensamiento siempre tiene lugar primero, a pesar de la tentación de creer que es al contrario. 4El mundo no piensa de esa manera, pero tú tienes que aprender que así es como piensas tú. 5De lo contrario, la percep­ción carecería de causa, y sería ella misma la causa de la realidad. 6En vista de su naturaleza altamente variable, eso es de todo punto imposible.
2. Al aplicar la idea de hoy mantén los ojos abiertos mientras te dices a ti mismo:

2No veo cosas neutras porque no tengo pensamientos neutros.

3Luego mira a tu alrededor, dejando que tu mirada se pose sobre cada cosa que notes el tiempo suficiente para poder decir:

4No veo un/una _____ neutro/a porque mis pensamientos acerca de _____ no son neutros.

5Podrías decir, por ejemplo:

6No veo una pared neutra porque mis pensamientos acerca de las paredes no son neutros.
7No veo un cuerpo neutro porque mis pensamientos acerca de los cuerpos no son neutros.

3. Como de costumbre, es esencial no hacer distinciones entre lo que crees que es animado o inanimado, agradable o desagradable. 2Independientemente de lo que puedas creer, no ves nada que esté realmente vivo o que sea realmente gozoso. 3Eso se debe a que todavía no eres consciente de ningún pensamiento realmente ver­dadero, y, por lo tanto, realmente feliz.
4. Se recomiendan tres o cuatro sesiones de práctica concretas, e incluso si experimentas resistencia, son necesarias cuando menos tres para obtener el máximo beneficio. 2En tal caso, no obstante, puedes acortar la duración de la sesión a menos del minuto que de otra forma se recomienda.

LECCIÓN 18 - (18 de enero)
No soy el único que experimenta los efectos de mi manera de ver.

1. La idea de hoy es un paso más en el proceso de aprender que los pensamientos que dan lugar a lo que ves nunca son neutros o irrelevantes. 2También hace hincapié en la idea, a la que posterior­mente se le dará cada vez mayor importancia, de que las mentes están unidas.
2. La idea de hoy no se refiere tanto a lo que ves como a la manera en que lo ves. 2Por lo tanto, los ejercicios de hoy hacen hincapié en ese aspecto de tu percepción. 3Las tres o cuatro sesiones de prác­tica que se recomiendan deben hacerse de la siguiente manera:
3. Mira a tu alrededor, y a medida que selecciones los objetos para la aplicación de la idea de hoy tan al azar como sea posible, descansa tu mirada en cada uno de ellos el tiempo suficiente para poder decir:

2No soy el único que experimenta los efectos de mi manera de ver

3Concluye cada sesión de práctica repitiendo esta afirmación más general:

4No soy el único que experimenta los efectos de mi manera de ver.

5Un minuto, o incluso menos, es suficiente para cada sesión de práctica.
 
LECCIÓN 19 (19 de enero)
No soy el único que experimenta los efectos de mis pensamientos.

1. La idea de hoy es obviamente la razón por la que lo que ves no te afecta a ti solo. 2Notarás que las ideas que presentamos relacionadas con el acto de pensar a veces preceden a las que están rela­cionadas con la percepción, mientras que en otras ocasiones se invierte ese orden. 3Eso se debe a que el orden en sí no importa. 4El acto de pensar y sus resultados son en realidad simultáneos, ya que causa y efecto no están nunca separados.
2. Hoy volvemos a hacer hincapié en el hecho de que las mentes están unidas. 2Rara vez se acoge bien esta idea al principio, puesto que parece acarrear un enorme sentido de responsabilidad, e incluso puede considerarse como "una invasión de la vida íntima”. 3Sin embargo, es un hecho que no existen pensamientos priva­dos. 4A pesar de tu resistencia inicial a esta idea, ya entenderás que para que la salvación sea posible, esta idea tiene que ser ver­dad. 5la salvación tiene que ser posible porque es la Voluntad de Dios.
3. El minuto de búsqueda mental que se requiere para los ejerci­cios de hoy debe hacerse con los ojos cerrados. 2Repite primero la idea de hoy y luego escudriña tu mente en busca de aquellos pen­samientos que se encuentren en ella en ese momento. 3A medida que examines cada uno de ellos, descríbelo en función del perso­naje o tema central que contenga, y mientras lo mantienes en la mente, di:

4No soy el único que experimenta los efectos de este pensamiento acerca de _____

4. El requisito de ser lo más imparcial posible al seleccionar los objetos para las sesiones de práctica ya te debe resultar bastante familiar a estas alturas, y de aquí en adelante no se repetirá diaria­mente, aunque se incluirá de vez en cuando a modo de recordato­rio. 2No olvides, sin embargo, que seleccionar los objetos al azar en todas las sesiones de práctica seguirá siendo esencial hasta el final. 3Esta falta de orden en el proceso de selección es lo que hará que finalmente tenga sentido para ti el hecho de que no hay gra­dos de dificultad en los milagros.
5. Además de las aplicaciones de la idea de hoy "según lo dicte la necesidad"; se requieren por lo menos tres sesiones de práctica, aunque el tiempo requerido para las mismas podría acortarse si ello fuese necesario. 2No intentes hacer más de cuatro.

LECCIÓN 20 (20 de enero)
Estoy decidido a ver.

1. Hemos tenido hasta ahora una actitud bastante relajada con respecto a nuestras sesiones de práctica. 2Apenas hemos tratado de dirigir el momento en que debes llevarlas a cabo; el esfuerzo requerido por tu parte ha sido mínimo, y ni siquiera se te ha pedido que cooperes o que te intereses activamente en ellas. 3Este enfoque ha sido intencional, y ha sido planeado muy cuidadosa­mente. 4No hemos perdido de vista lo importante que es invertir completamente tu manera de pensar. 5La salvación del mundo depende de ello. 6Mas no podrás ver si te sientes coaccionado, o si te abandonas al resentimiento y a la oposición.
2. Ésta es la primera vez que intentamos establecer cierta estruc­tura. 2No interpretes esto erróneamente como un intento de que­rer ejercer presión o fuerza. 3Deseas la salvación.4Deseas ser feliz. 5Deseas la paz. 6No lo has logrado todavía porque tu mente no tiene ninguna disciplina, y no puedes distinguir entre la dicha y el pesar, el placer y el dolor, o el amor y el miedo. 7Ahora estás aprendiendo a diferenciar unos de otros. 8Y grande en verdad será tu recompensa cuando lo logres.
3. Tu decisión de querer ver es todo lo que requiere la visión. 2Lo que quieres se te concede. 3No cometas el error de creer que el pequeño esfuerzo que se te pide es una indicación de que nuestro objetivo es de poco valor. 4¿Cómo iba a ser la salvación del mundo un propósito trivial? 5¿Y cómo podría salvarse el mundo si no te salvas tú? 6Dios tiene un solo Hijo, y él es la resurrección y la vida. 7Su voluntad se hace porque se le ha dado pleno poder en el Cielo y en la tierra. 8Con tu decisión de querer ver, se te da la visión.
4. Los ejercicios de hoy consisten en que te recuerdes a ti mismo a lo largo del día que quieres ver. 2La idea de hoy implica tácita­mente también el reconocimiento de que ahora no ves. 3Por lo tanto, cada vez que repites la idea, estás afirmando que estás deci­dido a cambiar tu estado actual por uno mejor, por uno que real­mente deseas.
5. Repite la idea de hoy lentamente y a conciencia por lo menos dos veces por hora, y trata de hacerlo cada media hora. 2No te desanimes si se te olvida hacerlo, pero esfuérzate al máximo por acordarte. 3Las repeticiones adicionales deben aplicarse a cual­quier situación, persona o acontecimiento que te perturbe. 4Pue­des verlos de otra manera, y los verás. 5Verás lo que desees ver. 6Ésta es la verdadera ley de causa y efecto tal como opera en el mundo.

LECCIÓN 21 (21 de enero)
Estoy decidido a ver las cosas de otra manera.

1. La idea de hoy es obviamente una continuación y ampliación de la anterior. 2Esta vez, sin embargo, además de aplicar la idea a cualquier situación concreta que pueda surgir, son necesarios también períodos específicos de búsqueda mental. 3Se te exhorta a que lleves a cabo cinco sesiones de práctica de un minuto com­pleto cada una.
2. Inicia las sesiones de práctica repitiendo la idea en tu interior. 2Luego cierra los ojos y busca con minuciosidad en tu mente aque­llas situaciones pasadas, presentes o previstas que susciten ira en ti. 3La ira puede manifestarse en cualquier clase de reacción, desde una ligera irritación hasta la furia más desenfrenada. 4El grado de intensidad de la emoción experimentada es irrelevante. 5Te irás dando cuenta cada vez más de que una leve punzada de molestia no es otra cosa que un velo que cubre una intensa furia.
3. Trata, por lo tanto, durante las sesiones de práctica, de no dejar escapar aquellos pensamientos de ira que consideras "insignifi­cantes". 2Recuerda que no reconoces realmente qué es lo que sus­cita ira en ti, y nada de lo que puedas creer al respecto tiene significado alguno. 3Probablemente te sentirás tentado de emplear más tiempo en ciertas situaciones o personas que en otras, sobre la base falsa de que son más "obvias" 4Esto no es cierto. 5Es mera­mente un ejemplo de la creencia de que ciertas formas de ataque están más justificadas que otras.
4. Al escudriñar tu mente en busca de todas las formas en que se presentan los pensamientos de ataque, mantén cada uno de ellos presente mientras te dices a ti mismo:

2Estoy decidido ver a _____ (nombre de la persona] de otra manera.
3Estoy decidido a ver _____ [especifica la situación] de otra manera.

5. Trata de ser tan específico como te sea posible. 2Puede, por ejemplo, que concentres tu ira en una característica determinada de alguna persona en particular, creyendo que la ira se limita a ese aspecto. 3Si tu percepción sufre de esa forma de distorsión, di:

4Estoy decidido a ver         [precisa la característica] de [nombre de la persona] de otra manera.
 
LECCIÓN 22 (22 de enero)
Lo que veo es una forma de venganza.

1. La idea de hoy describe con gran precisión la manera en que todo aquel que alberga en su mente pensamientos de ataque no puede sino ver el mundo. 2Habiendo proyectado su ira sobre el mundo, lo que ve es la venganza a punto de devolverle el golpe. 3De esta manera, percibe su propio ataque como un acto en defensa propia. 4Esto se convierte progresivamente en un círculo vicioso hasta que esté dispuesto a cambiar la manera como ve las cosas. 5De lo contrario, los pensamientos de ataque y contraata­que le consumirán y poblarán todo su mundo. 6¿De qué paz men­tal podría gozar en tales condiciones?
2. De esta fantasía salvaje es de lo que te quieres escapar. 2¿No es maravilloso recibir las buenas nuevas de que no es real? 3¿No te alegra sobremanera descubrir que te puedes escapar de ella? 4Tú has fabricado lo que deseas destruir; lo que odias y lo que quieres atacar y matar. 5Nada de lo que temes existe.
3. Mira hoy al mundo que te rodea por lo menos cinco veces, durante no menos de un minuto cada vez. 2medida que tus ojos pasen lentamente de un objeto a otro, de un cuerpo a otro, di para tus adentros:

3Veo únicamente lo perecedero.
4No veo nada que vaya a perdurar.
5Lo que veo no es real.
6Lo que veo es una forma de venganza.

7Al final de cada sesión de práctica, pregúntate:

8¿ Es éste el mundo que realmente quiero ver?

9La respuesta será obvia.

LECCIÓN 23 (23 de enero)
Puedo escaparme del mundo que veo renunciando a los pensamientos de ataque.

1. La idea de hoy describe la única manera de poder escapar del miedo que jamás tendrá éxito. 2Nada más puede lograrlo; nada más tiene sentido. 3Pero esta manera de escapar no puede fallar. 4Cada pensamiento que albergas da lugar a algún segmento del mundo que ves. 5Es con tus pensamientos, pues con los que tene­mos que trabajar, si es que tu percepción del mundo ha de cam­biar.
2. Si la causa del mundo que ves son los pensamientos de ataque, debes aprender que ésos son los pensamientos que no deseas. 2De nada sirve lamentarse del mundo. 3De nada sirve tratar de cam­biarlo. 4No se puede cambiar porque no es más que un efecto. 5Pero lo que sí puedes hacer es cambiar tus pensamientos acerca de él. 6En ese caso estarás cambiando la causa. 7El efecto cambiará automáticamente.
3. El mundo que ves es un mundo vengativo, y todo en él es un símbolo de venganza. 2Cada una de las percepciones que tienes de la "realidad externa" no es más que una representación grá­fica de tus propios pensamientos de ataque. 3Uno podría muy bien preguntarse si a esto se le puede llamar ver. 4¿No es acaso "fantasía" una mejor palabra para referirse a ese proceso, y "alu­cinación" un término más apropiado para su resultado?
4. Ves el mundo que has fabricado, pero no te ves a ti mismo como el que fabrica las imágenes. 2No se te puede salvar del mundo, pero te puedes escapar de su causa. 3Éste es el significado de la salvación, pues, ¿dónde se encuentra el mundo que ves cuando su causa ha desaparecido? 4La visión ya tiene un susti­tuto para todo lo que crees ver ahora. 5La hermosura puede ilumi­nar tus imágenes y transformarlas de tal manera que las llegues a amar, aun cuando fueron forjadas del odio, 6pues ya no las estarás forjando solo.
5La idea de hoy introduce el pensamiento de que no estás atra­pado en el mundo que ves porque su causa se puede cambiar. 2Éste cambio requiere, en primer lugar, que se identifique la causa y luego que se abandone, de modo que pueda ser reemplazada. 3Los primeros dos pasos de este proceso requieren tu cooperación. 4El paso final, no. 5Tus imágenes ya han sido reemplazadas. 6Al dar los dos primeros pasos, comprobarás que esto es cierto.
6. Además de usar la idea de hoy a lo largo del día según lo dicte la necesidad, se requieren cinco sesiones de práctica para su apli­cación. 2Según miras a tu alrededor, repite primero la idea para tus adentros lentamente, y luego cierra los ojos y dedica alrede­dor de un minuto a buscar en tu mente el mayor número posible de pensamientos de ataque que se te ocurran. 3Conforme cada uno de ellos cruce tu mente, di:

4Puedo escaparme del mundo que veo renunciando a los pensamientos de ataque acerca de _____

5Mantén presente cada pensamiento de ataque mientras repites esto, luego descártalo y pasa al siguiente.
7. Durante las sesiones de práctica, asegúrate de incluir tanto los pensamientos de ataque contra otros como los de ser atacado. 2Los efectos de ambos son exactamente lo mismo, puesto que ambos son exactamente lo mismo. 3Aún no reconoces esto, y lo único que se te pide de momento es que durante las sesiones de práctica los trates de igual modo. 4Todavía nos encontramos en la etapa de identificar la causa del mundo que ves. 5Cuando final­mente aprendas que los pensamientos de atacar y los de ser atacado no son diferentes, estarás listo para abandonar dicha causa.

LECCIÓN 24 (24 de enero)
No percibo lo que más me conviene.

1. No te das cuenta en ninguna de las situaciones que se presen­tan ante ti del desenlace que te haría feliz. 2No tienes, por lo tanto, una pauta por la que regir debidamente tus acciones, ni manera alguna de juzgar sus resultados. 3Lo que haces está deter­minado por tu percepción de la situación de que se trate, y esa percepción es errónea. 4Es inevitable, pues, que nada de lo que hagas sea en beneficio de lo que más te conviene. 5No obstante, lo que más te conviene constituye tu único objetivo en toda situa­ción que se perciba correctamente. 6De lo contrario, te resultará imposible reconocerlo.
2. Si te dieses cuenta de que en realidad no percibes lo que más te conviene, se te podría enseñar lo que ello es. 2Pero como estás convencido de que lo sabes, no puedes aprender. 3La idea de hoy es un paso encaminado a hacer que tu mente se vuelva receptiva de manera que el aprendizaje pueda dar comienzo.
3. Los ejercicios de hoy requieren mucha más honestidad de la que estás acostumbrado a usar. 2Te será más útil examinar unos pocos temas honesta y minuciosamente en cada una de las cinco sesiones de práctica que se deben llevar a cabo hoy, que un mayor número superficialmente. 3Se recomiendan dos minutos para cada uno de los períodos de búsqueda mental que los ejercicios de hoy requieren.
4. Las sesiones de práctica se deben comenzar repitiendo la idea de hoy, a lo que debe seguir una búsqueda mental con los ojos cerrados de aquellas situaciones en tu vida que aún no estén re­sueltas y que actualmente te están causando desasosiego. 2Debes hacer hincapié en descubrir cuál es el resultado que deseas. 3Te darás cuenta muy pronto de que tienes varios objetivos en mente como parte del resultado que deseas y también de que esos objeti­vos se encuentran en diferentes niveles y de que con frecuencia son conflictivos.
5. Al aplicar la idea de hoy, nombra cada situación que se te ocu­rra, y luego enumera minuciosamente todos los objetivos que te gustaría alcanzar en el desenlace de la misma. 2El modelo que se debe seguir en cada caso debe ser más o menos así:

3Lo que me gustaría que ocurriese en relación con _____ , es que _____ y que _____ sucediese,

y así sucesivamente. 4Trata de abarcar tantos diferentes desenlaces como honestamente se te ocurran, aun cuando algunos de ellos no parezcan estar directamente relacionados con la situación, o, lo que es más, ni siquiera parezcan tener nada que ver con ella.
6. Si haces estos ejercicios correctamente, te darás cuenta de inme­diato de que estás exigiendo de cada situación un gran número de cosas que no tienen nada que ver con ella. 2Te percatarás asimismo de que muchos de tus objetivos son contradictorios, que no tienes un resultado concreto en mente, y que no puedes por menos que experimentar desilusión con respecto a algunos de tus objetivos, independientemente de como se resuelva finalmente la situación.
7. Después de pasar revista a tantos objetivos anhelados como puedas para cada situación aún sin resolver que cruce tu mente, di para tus adentros:

2No percibo lo que más me conviene en esta situación,

y pasa a la siguiente.

LECCIÓN 25 (25 de enero)
No sé cuál es el propósito de nada.

1. Propósito es significado. 2La idea de hoy explica por qué nada de lo que ves tiene significado. 3No sabes para qué es. 4Por consi­guiente, no tiene significado para ti. 5Todo existe para tu benefi­cio. 6Para eso es para lo que es; ése es su propósito; ése es su significado. 7Al reconocer esto, tus objetivos se unifican. 8Al reco­nocer esto, lo que ves cobra significado.
2. Tú percibes al mundo y a todo lo que éste contiene como signi­ficativo desde el punto de vista de los objetivos del ego. 2Éstos objetivos no tienen nada que ver con lo que más te conviene, ya que tú no eres el ego. 3Esta falsa identificación no te permite entender cuál es el propósito de nada. 4Consecuentemente, no puedes sino hacer un uso indebido de ello. 5Cuando creas esto, te esforzarás por retirar los objetivos que le has asignado al mundo, en vez de intentar reforzarlos.
3. Otra forma de describir los objetivos que ahora percibes es decir que sólo tienen que ver con tus intereses "personales" . 2Pero puesto que no tienes intereses personales, tus objetivos en reali­dad no guardan ninguna relación con nada. 3Al abrigarlos, por lo tanto, no estás abrigando ningún objetivo en absoluto. 4Por consi­guiente, no sabes cuál es el propósito de nada.
4. Antes de que puedas entender los ejercicios, es necesario un pensamiento adicional. 2En los niveles más superficiales recono­ces el propósito de todas las cosas. 3Sin embargo, el propósito de algo no se puede entender en esos niveles. 4Por ejemplo, entien­des que el propósito de un teléfono es hablar con alguien que no se encuentra físicamente en tu proximidad inmediata. 5Lo que no comprendes es para qué quieres ponerte en contacto con él. 6Y es eso lo que hace que tu contacto con él sea o no significativo.
5. Es fundamental para tu aprendizaje que estés dispuesto a renunciar a los objetivos que le has adjudicado a todas las cosas. 2Reconocer que dichos objetivos no tienen sentido, en vez de con­siderarlos como "buenos" o "malos"; es la única manera de lo­grarlo. 3La idea de hoy es un paso en esa dirección.
6. Hoy se requieren seis sesiones de práctica, cada una de dos mi­nutos de duración. 2Comienza cada sesión repitiendo la idea de hoy lentamente; luego mira a tu alrededor y deja que tu mirada se pose sobre cualquier cosa que te llame la atención, esté lejos o cerca, sea "importante" o "nimia", "humana" o "no humana". 3Mientras tus ojos descansan sobre cada objeto así seleccionado, di, por ejemplo:

4No sé para qué es esa silla.
5No sé para qué es ese lápiz.
6No sé para qué es esta mano.

7Dilo lentamente, sin apartar los ojos del objeto hasta que hayas terminado la frase. 8Pasa luego al siguiente y aplica la idea de hoy de la misma manera.

LECCIÓN 26 (26 de enero)
Mis pensamientos de ataque atacan mi invulnerabilidad.

1. Seguramente resulta obvio que si puedes ser atacado es que no eres invulnerable. 2Ves el ataque como una amenaza real. 3Esto se debe a que crees que realmente puedes atacar. 4lo que tendría efectos a través tuyo también tiene que tenerlos en ti. 5Ésta es la ley que en última instancia te salvará, pero de la que ahora estás haciendo un uso indebido. 6Debes, por lo tanto, aprender a usarla en beneficio de lo que más te conviene en vez de en su contra.
2. Puesto que no podrás sino proyectar tus pensamientos de ata­que, temerás ser atacado. 2Y si temes ser atacado, es que crees que no eres invulnerable. 3Los pensamientos de ataque, por lo tanto, hacen que seas vulnerable en tu propia mente, que es donde se encuentran. 4Los pensamientos de ataque y la invulnerabilidad no pueden aceptarse al unísono, 5pues se contradicen entre sí.
3. La idea de hoy introduce el pensamiento de que siempre te atacas a ti mismo primero. 2Si los pensamientos de ataque entra­ñan forzosamente la creencia de que eres vulnerable, su efecto no es otro que debilitarte ante tus propios ojos. 3De este modo, han atacado tu percepción de ti mismo. 4puesto que crees en ellos, ya no puedes creer en ti mismo. 5Una falsa imagen de ti mismo ha venido a ocupar el lugar de lo que eres.
4. Practicar con la idea de hoy te ayudará a entender que la vulne­rabilidad o la invulnerabilidad son el resultado de tus propios pensamientos. 2Nada, excepto tus propios pensamientos, puede atacarte. 3Nada, excepto tus propios pensamientos, puede hacerte pensar que eres vulnerable. 4Y nada, excepto tus propios pensa­mientos, puede probarte que esto no es así.
5. La idea de hoy requiere seis sesiones de práctica. 2Se deben dedicar dos minutos completos a cada una de ellas, que pueden reducirse a uno en caso de que la incomodidad sea demasiado grande. No deben reducirse a menos de eso.
6. Comienza cada sesión repitiendo la idea de hoy, luego cierra los ojos y trae de nuevo a la mente aquellas cuestiones aún sin resol­ver cuyos posibles desenlaces te inquietan. 2La inquietud puede manifestarse en forma de depresión, ansiedad, ira, una sensación de coacción, miedo, malos presentimientos o preocupación. 3Cualquier problema aún sin resolver que tienda a reaparecer en tus pensamientos durante el día constituye un sujeto adecuado. 4No podrás abarcar muchos de ellos en cada sesión de práctica porque se debe dedicar más tiempo del habitual a cada uno de ellos. 5La idea de hoy debe aplicarse de la siguiente manera:
7. Primero, nombra la situación:

2Estoy preocupado acerca de _____

3Luego examina todos los posibles desenlaces que se te hayan ocurrido en conexión con la situación que te hayan causado inquietud, y refiriéndote a cada uno de ellos de manera muy con­creta, di lo siguiente:

4Temo que lo que pueda ocurrir es que _____

8. Si has estado haciendo los ejercicios correctamente, deberías haber encontrado cinco o seis posibilidades desagradables para cada una de las situaciones en cuestión, y probablemente más. 2Es mucho mejor examinar detenidamente unas cuantas situacio­nes que revisar un número mayor superficialmente. 3A medida que la lista de los desenlaces que prevés se haga más larga, es probable. que, algunos de ellos, especialmente aquellos que se te ocurran hacia el final, te resulten menos aceptables. 4Procura, no obstante, en la medida de lo posible, de tratarlos a todos por igual.
9. Después de que hayas nombrado cada desenlace que temes, di para tus adentros:

2Este pensamiento es un ataque contra mí mismo.

3Concluye cada sesión de práctica repitiendo una vez más para tus adentros la idea de hoy.

LECCIÓN 27 (27 de enero)
Por encima de todo quiero ver.

1. La idea de hoy expresa algo más fuerte que una simple resolu­ción. 2Le da prioridad a la visión por encima de todos tus demás deseos. 3Quizá te sientas indeciso con respecto a si usar esta idea o no, debido a que no estás seguro de si eso es lo que realmente quieres. 4Eso no importa. 5El propósito de los ejercicios de hoy es aproximar un poco más el momento en que esta idea sea comple­tamente verdadera para ti.
2. Puede que sientas una gran tentación de creer que se te está pidiendo algún tipo de sacrificio cuando dices que por encima de todo quieres ver. 2Si te sientes incómodo por la falta de reserva que esta idea entraña, añade:

3La visión no le cuesta nada a nadie.

4Si el temor a perder algo aún persiste, di además:

4Tan sólo puede bendecir.

3. Necesitas repetir la idea de hoy muchas veces para obtener el máximo beneficio. 2Se debe repetir por lo menos cada media hora, e incluso más si es posible. 3Puedes intentarlo cada quince o veinte minutos. 4Se recomienda que al despertarte o poco después, esta­blezcas un horario fijo según el cual vas a repetir la idea de hoy, y que trates de adherirte a él durante todo el día. 5No te será difícil hacerlo, aun si estás conversando u ocupado en otra cosa cuando llegue el momento de repetirla.6Siempre se puede repetir una frase corta silenciosamente sin que ello interfiera en nada.
4. Lo que realmente importa es: ¿con qué frecuencia te vas a acor­dar? 2¿Hasta qué punto quieres que esa idea sea verdad? 3Si contestas una de estas preguntas habrás contestado la otra. 4Probablemente te saltarás algunas prácticas, o tal vez muchas. 5No dejes que eso te perturbe, pero sí trata de adherirte al horario establecido de ahí en adelante. 6Si sientes que una sola vez durante todo el día fuiste completamente sincero al repetir la idea de hoy, puedes estar seguro de que con ello te habrás aho­rrado muchos años de esfuerzo.

LECCIÓN 28 (28 de enero)
Por encima de todo quiero ver las cosas de otra manera.

1. Hoy le estamos dando una aplicación realmente concreta a la idea de ayer. 2En estas sesiones de práctica vas a hacer una serie de compromisos definitivos. 3El que los cumplas o no en el futuro no es algo que nos concierna ahora. 4Si al menos estás dispuesto a hacerlos ahora, habrás dado el primer paso en el pro­ceso de cumplirlos. 5todavía estamos en el principio.
2. Tal vez te preguntes por qué es importante decir, por ejemplo, "Por encima de todo quiero ver esta mesa de otra manera”. 2De por sí, eso no es importante. 3Sin embargo, ¿qué existe de por sí? 4¿Y qué significa "de por Sí"? 5Ves a tu alrededor una legión de objetos separados, lo cual significa que en realidad no ves nada. 6O ves o no ves. 7Cuando hayas visto una sola cosa de otra manera, verás todas las demás cosas de otra manera también. 8La luz que veas en cualquiera de ellas será la misma luz que verás en todas ellas.
3. Cuando dices: "Por encima de todo quiero ver esta mesa de otra manera", estás comprometiéndote a abandonar todas las ideas preconcebidas que tienes acerca de la mesa, y a tener una mente receptiva con respecto a lo que esa mesa es y al propósito que tiene. 2No la estás definiendo en función del pasado. 3Estás preguntando qué es, en vez de decírselo. 4No estás constriñendo su significado a tu reducida experiencia con mesas, ni estás limi­tando su propósito a tus insignificantes pensamientos personales.
4. Nadie cuestiona lo que ya ha definido. 2Y el propósito de estos ejercicios es hacer preguntas y recibir respuestas. 3Al decir: "Por encima de todo quiero ver esta mesa de otra manera" te estás comprometiendo a ver. 4Mas no es éste un compromiso exclu­sivo. 5Es un compromiso que es aplicable tanto a la mesa como a cualquier otra cosa.
5. Podrías, de hecho, alcanzar la visión valiéndote sólo de esa mesa, si pudieses abandonar todas tus ideas acerca de ella y mirarla con una mente completamente receptiva. 2Tiene algo que mostrarte; algo bello, puro y de infinito valor, repleto de felicidad y esperanza. 3Oculto tras todas las ideas que tienes acerca de ella se encuentra su verdadero propósito, el cual comparte con todo el universo.
6. Al usar la mesa como un sujeto para la aplicación de la idea de hoy, estás en realidad pidiendo ver cuál es el propósito del uni­verso. 2con cada objeto que uses en tus sesiones de práctica estarás haciendo esa misma petición. 3Y estarás comprometién­dote con cada uno de ellos a dejar que su propósito te sea reve­lado, en lugar de imponerles tú tu propio dictamen.
7. Hoy llevaremos a cabo seis sesiones de práctica de dos minutos cada una, en las que primero debes repetir la idea de hoy, y luego aplicarla a cualquier cosa que veas a tu alrededor. 2No sólo debes escoger los objetos al azar, sino que, al aplicarles la idea de hoy, debes ser igualmente sincero con todos ellos, intentando recono­cer de esta manera la idéntica contribución que cada uno de ellos le presta a tu visión.
8. Como de costumbre, las aplicaciones deben incluir el nombre del objeto en el que tu mirada se pose, y debes mantener tus ojos sobre él mientras dices:

2Por encima de todo quiero ver este(a) _____ de otra manera:

3Cada aplicación debe hacerse muy despacio y tan a conciencia como sea posible. 4No hay prisa.

LECCIÓN 29 (29 de enero)
Dios está en todo lo que veo.

1. La idea de hoy explica por qué puedes ver propósito en todo. 2Explica por qué nada está separado, por sí mismo o en sí mismo. 3También explica por qué nada de lo que ves tiene significado alguno. 4De hecho, explica cada una de las ideas que hemos usado hasta ahora, y también todas las subsiguientes. 5La idea de hoy es el pilar de la visión.
2. Es probable que a estas alturas te resulte muy difícil entender la idea de hoy. 2Puede que creas que es tonta, irreverente, insen­sata, graciosa e incluso censurable. 3Ciertamente Dios no está en una silla tal como tú la ves. 4No obstante, ayer subrayamos que una simple mesa comparte el propósito del universo. 5lo que comparte el propósito del universo comparte el propósito de su Creador.
3. Trata hoy, pues, de comenzar a aprender a mirar a todas las cosas con amor, con aprecio y con una mentalidad abierta. 2Ahora mismo no las ves. ¿Cómo podrías saber lo que en ellas se encie­rra? 4Nada es como a ti te parece que es. 5Su santo propósito está más allá de tu limitado alcance. 6Cuando la visión te haya mos­trado la santidad que ilumina al mundo, entenderás la idea de hoy perfectamente. 7Y no entenderás cómo pudo jamás haberte resultado difícil.
4. Nuestras seis sesiones de práctica, de dos minutos cada una, deben seguir la norma habitual: comienza repitiendo la idea en tu interior y luego aplícala a aquellos objetos seleccionados al azar que estén a tu alrededor, nombrando específicamente cada uno de ellos. 2Trata de evitar la tendencia a dirigir la selección, que, en el caso de la idea de hoy, puede ser una gran tentación debido a su naturaleza totalmente extraña. 3Recuerda que cual­quier orden que tú intentes imponer le es igualmente extraño a la realidad.
5. Debes, por lo tanto, evitar al máximo ser tú mismo quien dirige la selección de objetos. 2Una lista adecuada podría incluir, por ejemplo:

3Dios está en este perchero.
4Dios está en esta revista.
5Dios está en este dedo.
6Dios está en esta lámpara.
7Dios está en ese cuerpo.
8Dios está en esa puerta.
9Dios está en esa papelera.

10Además de repetir la idea de hoy durante las sesiones de prác­tica asignadas, repítela como mínimo una vez por hora, mirando lentamente a tu alrededor mientras repites las palabras para tus adentros sin prisa. 11Por lo menos una o dos veces deberías expe­rimentar una sensación de sosiego mientras haces esto.

LECCIÓN 30 (30 de enero)
Dios está en todo lo que veo porque Dios está en mi mente.

1. La idea de hoy es el trampolín a la visión. 2Por medio de esta idea el mundo se abrirá ante ti, y al contemplarlo verás en él lo que nunca antes habías visto. 3lo que antes veías ya no será ni remotamente visible para ti.
2. Hoy vamos a intentar un nuevo tipo de "proyección". 2No vamos a tratar de deshacernos de lo que no nos gusta viéndolo afuera. 3En lugar de ello, trataremos de ver en el mundo lo que está en nuestras mentes, y lo que deseamos reconocer se encuen­tra ahí. 4Así pues, estamos tratando de unirnos a lo que vemos, en vez de mantenerlo separado de nosotros. 5Ésa es la diferencia fundamental entre la visión y tu manera de ver.
3. La idea de hoy debe aplicarse tan frecuentemente como sea posible a lo largo del día. 2Cada vez que tengas un momento, repítela lentamente para tus adentros, mirando a tu alrededor y tratando de comprender que la idea es aplicable a todo lo que ves ahora o podrías ver ahora si estuviese al alcance de tu vista.
4. La verdadera visión no está limitada por conceptos tales como "cerca" o "lejos". 2Para que te vayas acostumbrando a esta idea, trata de pensar, a medida que aplicas la idea de hoy, en cosas que estén más allá de tu alcance visual, así como en aquellas que de hecho puedes ver.
5. La verdadera visión no sólo no está limitada por el espacio ni la distancia, sino que no depende en absoluto de los ojos del cuerpo. 2La mente es su única fuente. 3Como ayuda adicional para que te vayas acostumbrando cada vez más a esta idea, dedica varias sesiones de práctica a aplicarla con los ojos cerrados, usando cual­quier tema que te venga a la mente, mirando en tu interior en vez de afuera. 4La idea de hoy es aplicable por igual tanto a lo uno como a lo otro.

LECCIÓN 31 (31 de enero)
No soy víctima del mundo que veo.

1. La idea de hoy es la introducción a tu declaración de emanci­pación. 2Una vez más, la idea debe aplicarse tanto al mundo que ves fuera de ti como al que ves dentro. 3Al aplicar la idea de hoy lo haremos de una manera que se utilizará cada vez más, con ciertas modificaciones que ya se irán indicando. 4En general, esta manera de practicar comprende dos aspectos: uno en el que apli­cas la idea de manera más prolongada, y otro en el que haces frecuentes aplicaciones de la idea en el transcurso del día.
2. La idea de hoy requiere dos sesiones de práctica más largas que de costumbre, una por la mañana y otra por la noche. 2Se reco­miendan de tres a cinco minutos para cada una de ellas. 3Durante ese intervalo, mira lentamente a tu alrededor mientras repites la idea dos o tres veces. 4Luego cierra los ojos y aplica la idea tu mundo interno. 5Te liberarás de ambos al mismo tiempo, pues el interno es la causa del externo.
3. Mientras exploras tu mundo interno permite simplemente que cualquier pensamiento que cruce tu mente llegue hasta tu con­ciencia, obsérvalo por un instante, y luego reemplázalo con el siguiente. 2Trata de no establecer ninguna jerarquía entre ellos. 3Observa su ir y venir tan desapasionadamente como puedas. 4No te detengas en ninguno en particular, sino trata de mantener un ritmo uniforme y calmado, sin ningún marcado interés por tu parte. 5Mientras estés sentado observando tus pensamientos serenamente, repite la idea de hoy en tu interior tan a menudo como quieras, mas sin ninguna sensación de premura.
4. Repítela además tan frecuentemente como puedas en el trans­curso del día. 2Recuerda que al hacerlo estás haciendo una decla­ración de independencia en nombre de tu propia libertad. 3Y en tu libertad radica la libertad del mundo.
5. La idea de hoy es también especialmente útil como respuesta a cualquier tipo de tentación que pueda presentarse. 2Es una decla­ración de que no vas a sucumbir a ella, aprisionándote así a ti mismo.